martes, agosto 29, 2006

9-8-7-6-5-4-3-2-1-0

MIS NÚMEROS

El 0 es la totalidad, el holismo universal que vamos destruyendo cada vez que reconstruimos algo. Puede ser un orificio para perdernos o una isla en la inmensidad del mar.

El 1 me recuerda que cada persona es “única e irrepetible” como dice el lugar común, o univoca como digo yo. El 1 es el número de mi mismo, del individuo que respira con sus propios pulmones, que camina por las calles sin que nadie la note, del que despierta en las madrugadas sintiendo las pulsaciones del universo.

El 2 es el equilibrio, la dualidad. Una balanza tiene dos brazos para sostener el vértice en estado perfecto. El amor lo rige este número, Ella y Yo, juntos e indivisibles, guiados por la necesidad humana de abrazarnos, de besarnos, de pelearnos, de engullirnos entre sábanas, de sonreírnos ante los demás atónitos que no entienden el valor del amor en estos tiempos.

El 3 es místico pero le tengo desconfianza. Admiro el triángulo y su perfección pero como figura geométrica, de otra forma son dos los que gozan y un terceros que sufre y como siento que una punzada humanística duerme en mi costado, prefiero la verdad a la mentira. ¿Será por eso que la santa trinidad no se procrea?

El 4 es el número de la amistad. Tiene como virtud ser el resultado de sumar dos veces el amor, por eso la amistad es una de las mayores fortalezas del ser humano, pero la verdadera, la que escasea, no la que se compra con dones y favores. Quien se jacte de tener muchos amigos debería revisar el concepto de amistad que ha construido. Buenos son pocos. Nací un 24, de allí mi fascinación por estos números ya que mi mundo se construye con dos esencias, el amor y la amistad.

El 5 es el apoyo, la lucha y la palabra. Cinco dedos tiene cada una de mis manos, con ellas construyo mi futuro, abrazo a quienes amo y escribo mis delirios.

El 6, ese número que muchos desprestigiaron con su sonsonete apocalíptico. Es número de hombre, dice la Biblia y entonces ¿por qué tanto temor frente a él? Como vivimos en un siglo en el cual poco le importa el hombre, su número es vituperado.

El 7, está rodeado de una gracia singular y con él se ha dictaminado muchos roles. Que siete las artes, siete los pecados capitales, siete la maravillas del mundo, etc…De nuevo el enfoque religioso cristiano, 7 es el número de Yhavé y la perfección, pero, ¿qué tiene por ejemplo el 7 que no tenga en 4 la perfección?

El 8, es verticalidad, su forma lo confirma. Si el ocho se horizontaliza asemeja al infinito, dos círculos levemente tocados, pero también cruzados, cortados entre sí. El nudo del ocho es rigidez ¿Quién puede desatar el ocho?

El 9 es la mujer, sus curvas, su epicentro pasional. Inclinado al universo el 9 puede salvarlo del caos. Es difícil dibujar este número sin perder la línea, sin sacrificar su estética, fácilmente la torpeza puede hacer que grafiquemos una q o una g. Dos números juntos que complementan al dos es el número del hombre y el número de la mujer: 69

De aquí en adelante los números pierden su autonomía e individualidad, se acompañan y quizás tengan otros significados vedados para mí.

jueves, agosto 24, 2006

DUALIDAD

Lo he visto crecer muchas veces, desde que cumplí la edad del erotismo. Siempre testigo de sus retorcijones, de sus despertares insospechados cuando en alguna reunión era revestido de grandeza por el influjo cósmico de algún coqueteo vago, o por el susurro de alguna melodía en los oídos de una chica. También lo he visto ebrio, intentando asirse de las paredes húmedas para resistir un poco más el embate de la noche, o sediento al intentar alcanzar el brebaje imposible de las Ninfas. Triste también ha estado, a quién engaño, derrotado por la indiferencia de unos muslos lascivos que se escapan intactos después de una noche placentera, o acalorado por el trópico después de una ardua tarde de labores. Él es yo, y yo soy él, dualidad simbiótica que me permite tener el auto-descaro de acariciarlo mientras escribo su historia.

viernes, agosto 18, 2006

AGOSTO 18. 4:30 AM. DESNUDO. EN EL BORDE DE SU CAMA.

Me acerco y le susurró al oído:
Soy un hombre digno de confianza,
No vago por las calles vendiendo ilusiones
y no le he puesto precio a mis decencias.
Tu cuerpo es fuente
En él naufrago y me enternezco
Te llamo mi fosa, mi espada, mi trinchera
Mi decantación lunar bajo tus sábanas
Deambulo por tu espalda, bebo de tu vientre
Naufrago en tu cintura, me recuesto en tus nalgas
Pero termino siempre en el vértice real
El epicentro….
No te ofrezco un plan con felicidad incluida
Ni un ramillete de estrellas, ni mis versos
Te doy mi cuerpo con sus cicatrices
Mi humo, mis labios, mi carne y sus venas
Mi alma no te entrego pero lo tengo en duda
Y si el sexo es el secreto….
Soy transparente, no le apuesto al engaño
No vivo feriando sentimientos, ni alfombras,
Ni gatos, ni burlescos, de ti soy un adepto.
Déjame ser tuyo, eso te ofrezco
Soy un hombre digno de toda confianza
Porque después de una noche de tres secretos
Y mientras duermes
Desnuda
Denodada
Diosa
Soy capaz de escribirte un verso.

miércoles, agosto 16, 2006

I REMEMBER OF MY MOTHER

“A la dadora de vida: mi madre

Las ventanas permanecen abiertas recordando una canción que se le ha filtrado al silencio. El moho surte las paredes de un nostálgico color verde. Hiede a tiempo descompuesto. Mi madre lo había predicho aquella tarde de enero mientras sus dedos danzaban vertiginosamente para impedir quemarse con los carbones asidos a los plátanos. El tinto ya reposaba sobre los rescoldos conservando su aroma de vegetales secos. La hornilla se aferraba a su greda ahumada gracias al trabajo eficaz del pasto y la boñiga de vaca que daban la sensación de estar frente a un objeto espeluznado por el uso. Llovía.

Por ese entonces todo era cobardía y silencio. Ella tejía sus días al son de la creencia en el futuro, yo bebía de su optimismo y parecíamos ser felices. Degustábamos cada sorbo de café alrededor de las historias de su pasado, sus miedos y sus errores. Hablábamos sólo de ella porque solía decir que sobre alguien que no ha vivido no se puede hablar. Sus manos surcadas por arrugas y callos más de una noche refrescaron mi frente, y el vapor de su boca amedrentó el frío que se colaba entre las tejas de zinc. Con sus cuentos dormía despierto creyendo que el resplandor invadiría un día nuestros sueños.

Nunca le escribí porque un enorme complejo se apoderó de mi alma. Perdí esos años arañando la fortuna que no se hizo esquiva. Amé como ella lo dictaminaba: con el cerebro porque el corazón es débil. Sólo una vez la visité en veinte años. Fue para una época de luces y besos, y su abrazo me pareció cargado de resentimiento. Años antes sufría por mi condición de joven débil y anacoreta, y aquel día se entristeció al ver esos enormes tentáculos vistosos que ya no dejaban descubrir mi pasado. Hablamos de ella porque aún yo no había vivido. Luego partí de nuevo. Llovía.

Ahora la casa está vacía y su ausencia es más notoria. Afuera llueve.
Psd: FELIZ CUMPLEAÑOS MADRE!!!

lunes, agosto 14, 2006

SIETE AÑOS DE IMPUNIDAD...

Hace siete años, un 13 de agosto Colombia se conmovió, lloró, salió a las calles y gritó -nunca más impunidad- Habían asesinado a uno de sus hijos favoritos....

Pero el olvido reina entre cordilleras, hoy, algunos lo seguimos llorando y unos pocos tercos nos resistimos a que la impunidad ponga sus larvas de nuevo en esta tierra. Con la ausencia de la víctima, le dolor va doblegando los cu
erpos y los muertos son de sus dueños...los demás olvidan!.

Debemos decir que no a las tinieblas del olvido, los asesinos andan libres con sus guadañas listas...me uno a las voces de Mazo y Don Cigarro, que ya han posteado sobre el tema, y doy a la luz un pequeño texto que escribí hace 3 años....porque nunca olvidaré...

EL DIA QUE MURIO LA RISA

Sólo hasta hoy he tenido el valor de escribir sobre la más humillante de las muertes, tal vez para hacerle contrapeso a la letra de una canción de Robi “Draco” Rosa que vaticina:

“Morir es olvidar, ser olvidado”
[1]

Escribo con rencor por el triunfo de la barbarie sobre la osadía de la verdad. La muerte de Jaime Garzón, ocurrida un agorero trece de agosto de 1999. Esa mañana en la fría Bogotá la parca desenfundó la guadaña de la ira, eliminado para lo terrenal el espíritu burlesco de la comedia crítica. En esa calle murieron muchas esperanzas, y no pocas valentías, que tras el verbo certero nos protegía. Ante una broma polifónica de Garzón uno no sabía si reírse a carcajadas o soltar un estrepitoso llanto. Él sabía conjugar la risa con la reflexión ideológica de un hombre fundamental.

Tratar de explicar en los archivos de la impunidad el génesis de su fin es una labor para detectives y burócratas, mejor es preguntar ¿En dónde duerme la mano asesina que firmó aquella sentencia? ¿Estará, acaso, redactando otro dictamen contra los hombres? La historia sufre de amnesia, sobre todo en estos lares en donde han muerto muchos, y Garzón ha sido mi más doloroso.

No tuve más lágrimas para llorarlo porque ante la crueldad hasta el mejor acróbata se asusta. Por eso hasta hoy, cuatro años después y habiendo repasado sus sonrisas tras la fría pantalla que congela algún pretérito, me atrevo a recordarlo para ustedes, porque antes, en un verso que presiente los pasos y los fulgores de la muerte, ya lo había presentido:

“Una sombra más entre mil sombras
pero consciente del obstáculo.
Sin manos puedo abrazar el mundo,
sin oídos capturar silencios.

Es que morir es empezar
a vivir, inexplicablemente !
[2]

Así es que lo conservo. Esta vez Robi "Draco" Rosa se equivocó, Garzón jamás será olvidado.


[1] Albúm Vagabundo. Tema: Morir. Robi “Draco Rosa”
[2] Fragmento poema Totem. Carlos Arturo Gamboa B.

jueves, agosto 10, 2006

LA HISTORIA DE LOS LIBROS




Imagen: Afiche promocional de la puesta en escena de "Opio en las nubes" Teatro Nacional de Colombia

Los libros no sólo contienen historias, muchos de ellos poseen las suyas. La forma en que los textos entran y salen de nuestras vidas puede ser parte de una conspiración bibliófila universal, e incluso dignas del “realismo mágico”. La anécdota que contaré a continuación tiene que ver con esa manera cósmica de conectar lectores y textos, de unir deseos y apetencias, rutas y lecturas de la vida, de la vida de los libros…

La novela “Opio en las nubes” construye un mundo mítico de la ciudad moderna, centrando su accionar en la Bogotá de los años noventa, en ella Chaparro Madiedo, su autor, logra poner en evidencia una cultura de lo urbano tocada por los grandes dramas humanos de la época postmoderna, además hace del rock su banda sonora y nos deja los oídos trastocados por guitarras eléctricas y baterías desesperantes que pueblan los bares, las calles, las noches y las cabezas repletas de drogas volátiles. El libro lo adquirí en la Librería Lerner, lugar mágico en donde un tinto, una alfombra y la delicadeza de los libros se combinan para hacer sentir la pulsación de la letra. Era el año de 1998 y al regresar a Ibagué el libro había sido consumido en un viaje mucho más que placentero. No acostumbro a leer en las “flotas”, prefiero degustar el paisaje, pero aquella vez el libro decía más que las lejanas cordilleras marchitas por el verano. Con los libros ocurre igual que con las conquistas de mujeres, si triunfas con uno(a) quieres contártelo a tus mejores amigos, corriendo el riesgo de perderlo (as). Y de esa manera Opio terminó en el catre de un conocido (ojalá hubieses sido amigo) y nunca lo degustó pero después de ocho meses y muchas insistencias terminó por devolvérmelo con muchas cicatrices de uso. Todo ese tiempo permaneció debajo de su colchón de recién casado. Volví a poseerlo y me gustó más que la primera vez. Me emocioné y se lo presté a un compañero de trabajo quien gusta de los buenos libros. Lo mantuvo un tiempo preso de su pasión y regresó un poco más desojado. Una noche de copas, pero no una noche loca, me emocioné contándole al Lobo Digital sobre la novela, creo que el se emocionó y terminó llevándola a su cama. Fueron muchos meses de ausencia, muchos deseos comprimidos bajo mis sábanas esperando que mi amigo se saciara de esas páginas y pudiera de nuevo tener su historia entre mis dedos (frase plagiada de una canción). Cuando me había hecho a la idea de perder ese libro para siempre, cuando el Lobo digital me había confesado que las páginas estaban esparcidas en algún rincón olvidado y húmedo, cuando había decidido olvidar, llegó un mensajero, traía la cara dibujada por la dicha de hacer feliz a otro, es decir por la mejor de las dichas!!! Me entregó el libro como quien entrega una hija adolescente al peor de los truhanes. Agarré la novela, la llevé presuroso a mi regazo, la ojeé desde mi recelo, tenía un vestido nuevo, venía recién maquillada, se podía ver que su rostro había sido bañado por la fuente de la eterna juventud. -Esta noche dormiré en sus brazos – pensé. Luego abrí la primera página, esa que siempre tiene olor a invitación, y una frase escrita desde la dedicación-provocación decía: “Los libros no son palomas mensajeras, rara vez regresan a casa” Entonces entendí que los libros son como las mujeres que tanto amamos.

martes, agosto 08, 2006

DECÁLOGO DEL PERFECTO COMENTARISTA

Hace algunos días publiqué el "Manifiesto Blog" el cual tuvo gran acogida entre los ciber-amigos visitantes, incluso uno de ellas -SANGRE ÄCIDA- propuso construir el Decálogo del Perfecto Comentarista, con el ánimo de ir tejiendo una ética bloger, o algo así. El ejercicio arrancó con algunas participaciones pero luego no se supo más. Para no olvidarlo entrego en este post los primeros "mandamientos" esperando sus valiosos aportes. Son publicados con el nombre de quien los sugirió, para que asuman sus opiniones.

1. No desear el comentario de tu prójimo (Carlos Gamboa)
2. Amarás el mundo Blog por sobre todas las cosas. (Sangre Ácida)
3. No harás de troll en un blog que no te gusta y respetarás a los trolls que visiten tu blog sin que esto signifique no moderar sus comentarios. (Mazo)
4. No dárselas de profundo con frases ridículas como: "el viento me trajo acá y ahora volamos juntos", no huevadas así no, ó se comenta lo que uno lee y reflexiona o nada. (Invisible Soledad)
5. Ser honesto. -No efectuar comentarios con segundas intenciones- (Rabidiota -Ahoratodostusolo)
6. Ser prudente -Evaluar las consecuencias de lo que pretende escribir antes de hacerlo- (Rabidiota -Ahoratodostusolo)
7. Ser valiente - Decir lo que se requiere cuando previa prudente evaluación se ha concluido que hay algo que vale la pena decir- (Rabidiota -Ahoratodostusolo)
8. Ser respetuoso de los demás. – Empatía, tanta falta hace en nuestros tiempos. (Rabidiota -Ahoratodostusolo)
DECÁLOGO AMPLIADO DEL BUEN COMENTARISTA

Han llegado muchas más opiniones acerca del oficio del comentarista blog, aquì las dejo como aporte colectivo a este blog.

9. No comentar sin haber leído la publicación....! (Medemoiselle)

10. Que el comentario sea recíproco, si amablemente comentas se debería contestar como se merecen, que no es lo mismo que obligado aquí comenta quién quiere. (Rebel)

11. No te esconderás en el anonimato para ofender mariconamente. Pero puedes hacerlo para un piropo, eso da un toque de misterio. (Cieloazzul)
12. El plagio no acepta faltas de ortografía. (Cieloazzul)

13. No aceptarás comentarios anónimos de mala fe. (Anticomentarista ilustrado)

14. El blogs es un espacio abierto, quien quiere entra y quien quiere deja comentarios independientes a como sean… aquí no se paga arriendo como pagamos en el día a día, la verdad para mi la Blogosfera es un mundo en silencio, nos abrazamos pero no logramos vernos, las palabras envueltas en letras nos acercan. (Freyja)

15. Aquí hay libertad de gritar, llorar y reír, y lo que no se escucha se escribe, aquí nadie es genio, todos tiene el mismo valor y aquí no se viene a competir como el mundo de afuera, este mundo no busca genios...une geografías. (Freyja)

16. No dejar comentarios que infartan, del tipo "Buen blog, visita el mío y te sorprenderás". (Antoinette)

17. El mundo blog es un lugar para pensar antes de hablar...(Pala-labra)

18. Se puede decir lo mismo sin ofender. (Hippie Viejo)

19. Ser respetuosos en el comentario, pero también críticos. (Rebel)

20. Antes de comentar, leerás, por cierto, el post con detención, y luego leerás los comentarios que han hecho los demás, para luego al escribir el tuyo, puedas citar a quién haya dicho algo parecido o contrario a lo que tú expresas. (Invisible Soledad)